Ahora que se está acercando el fin del año, parece ser un momento apropiado para reflejar un poco sobre nuestra actitud sobre el cambio. Os presento algunos pensamientos al respecto.
Nadie es perfecto: todos tenemos ideas, costumbres o conocimientos mejorables. Sentémonos satisfechos por lo que hemos logrado, pero no seamos complacientes.
La vida es cambio, movimiento. La ausencia de cambio equivale a la muerte.
Quien vive sin cambiar, es un vivo muerto. La rutina es cómoda, pero quien deja que su vida sea regida por rutinas, dogmas, rituales o tradiciones, está encaminado hacia la muerte espiritual. Quien deja de aprender, de enterarse de lo que ocurre más allá de su horizonte mental, deja de vivir.
Es importante disfrutar de lo que tienes y buscar la felicidad en las cosas y acciones del dia de hoy, en lugar de buscarla en lo que se desea para el dia de mañana. Pero no por eso debes dejar de mantenerte abierto ante lo nuevo.
¡Seas curioso!
La vida es cambio. Rigidez, la muerte.
¡Que sea, entonces, el año venidero uno lleno de vida!
Nota: este post fue publicado originalmente, en versión ligeramente distinta, en mi blog – ahora cerrado – “Tiempos de Cambio”. La imagen que acompaña el post es una foto tomada por el autor.
losrumbosdelcambio 
Metafóricamente, Cronos o Saturno representa el Tiempo, él se comía a sus hijos y castró a su padre, y de esta manera “detuvo el Tiempo”, solo gobernaba él. Pero las fuerzas de la Vida se unieron para conspirar y derrotarlo, se sumaron dioses y titanes para este proyecto y luego, se repartieron los cielos, los mares, la tierra y el inframundo… la vida lo cubre todo, lo abarca todo, se dispersa, se multiplica y se diversifica.
Me gustaMe gusta
La vida puede ser considerada como un proceso de auto-organización de la materia (ver mi entrada sobre Teilhard de Chardin). Como tal, tiene la capacidad de sobreponerse a las condiciones adversas que a lo largo de la historia de la tierra le ha tocado enfrentar.
Me gustaMe gusta